A GIRL WALKS HOME ALONE AT NIGHT (2014) VAMPIROS EN MEDIO ORIENTE. RESEÑA.

Viejo monstruo, nuevos lares.

El genero de vampiros es uno de los más antiguos y recurrentes en el Horror y ha probado ser uno de los más versátiles. Los Vampiros han pasado por todo, desde rancios aristócratas viviendo en grandes y góticos castillos del pasado a cazadores a sueldo en increíbles mundos apocalípticos del futuro. Los resultados entregados al público van desde clásicos del cine mundial hasta las misericordiosamente olvidables. Mostrar una historia original ciertamente es una tarea difícil dentro de un genero con un siglo de historia en las pantallas. Ana Lily Amirpour, con su sello muy particular, logra entregarnos en A Girl Walks Home Alone at Night una propuesta exquisitamente estilizada, con un giro económicamente original a la situación de la vampira aterrizado en una inusual ubicación.

Vampiros en Medio Oriente

En un pequeño pueblo ficticio de Irán llamado Bad City, vive nuestro vampiro sin nombre llamado simplemente The Girl – La Chica. Fanática de la música de los 80, la Chica recorre las calles de noche acechando, buscando nuevas víctimas, cruzándose con todo tipo de personas. Mientras tanto, Arash, un joven normal y corriente, tiene problemas para pagar las drogas de su padre, que es adicto a la heroína. Por eso, el maleante del pueblo le confisca el auto a Arash. Un poco más tarde, la Chica se encuentra con este mismo maleante y este encuentro fortuito ocasionará que la vida de varios personajes cambie para siempre.

Atmosfera sobre historia.

La historia es bastante simple. Ana Lily Aminpour se centra más en la atmósfera que en contar una historia. La satisfecha soledad del vampiro contrastado con la desesperanza y  una vida con pocas aspiraciones de los demás personajes en un pequeño pueblo industrializado, deprimente y olvidado. Es una singular mezcla de horror con un fuerte aderezo de mostrar las sensaciones y emociones, soledad y nostalgia. El hecho de haber sido filmada en solo 24 días muestra claramente que Aminpour tenía una idea muy clara de lo que quería lograr. Además, a lo largo de la película podemos ver ejemplos de las influencias de la directora. Desde las secuencias oníricas de David Lynch, hasta el oscuro sentido del humor y los personajes solitarios en ciudades desérticas del peculiar Jim Jarmusch. Esta singular mezcla de elementos es ensamblada a la perfección por Aminpour, mostrando una historia melancólica y etérea.

Versatil vampiresa.

Bad City está lleno de personajes extravagantes y en general los actores interpretan de manera convincente Sheila Vand, que interpreta a La Chica, se destaca como la vampira de dulce rostro adolescente. Pudiendo lucir misteriosa con su largo velo negro que cubre su delgado cuerpo, inocente como cualquier chica gótica que se prepara para una fiesta y baila lentamente con su música favorita, pero amenazante y aterradora cuando ataca a sus víctimas. Por el contrario, Arash Marandi, quien interpreta a Arash, es inexpresivo, incapaz de transmitir ninguna emoción.

Iran en blanco y negro.

Filmada en un bello y espléndido blanco y negro, que enfatiza la desolación y el deprimente estado en que se encuentra Bad City. Esta fue una gran decisión estilística. El diseño artístico también está muy bien logrado. Aunque la historia se desarrolla en Irán y todos los personajes hablan farsi, fue una sorpresa descubrir que la película se había rodado íntegramente en Taft, un pequeño pueblo de California. Además, al ser la película un caleidoscopio de estilos y géneros, la música no podía quedarse atrás. Combinan adecuadamente una partitura musical típica de una película de terror con música electrónica y de Oriente Medio y con ritmos semejantes a las canciones de los años 80.

No para todos los gustos.

Con las aspiraciones artísticas bien conseguidas, A Girl Walks Home Alone at Night, está dirigida a fanáticos del vampirismo que disfrutan de películas como Only Lovers Left Alive o Let the Right one in; pero no será del agrado de aquellos que prefieren películas de vampiros más juveniles como Underworld o Crepúsculo. Aminpour ha hecho una película que no asusta al público. Requiere que el espectador lo aprecie. y dejarse sumergir en una atmósfera bien construida y misteriosa que la gran mayoría de las películas del género quisieran lograr.

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