SEVERANCE (2022) UNA REALIDAD APARTE. SERIES REVIEW

Vivir en estado de expansión energética diluyéndose en la vida, en la existencia; sentir e identificarte de manera permanente con la corriente que hace posible tu presencia como forma en este universo. La corriente del tiempo es la esencia de la llamada “vida”. De eso se trata todo, de cómo pasar el tiempo.  

El cómo pasamos el tiempo es parte de esta vida. Siempre estamos viendo a la ventana pensando en el perro que está sin hacer nada o en el lugar donde quisiéramos estar; vemos videos en internet de como las personas se divierten, viajan y disfrutan. Todas esas son algunas de las realidades que vemos, pero no son la realidad en sí, o por lo menos no todo el espectro de la realidad, de otra manera esa realidad no podría funcionar. 

Para nadie es sorpresa que esa visión de la realidad aparezca casi siempre en el horario laboral. En donde uno tiende a separarse de sí mismo para aguantar los embates de la monotonía. Muchos odian su trabajo, otros no lo odian, más bien odian donde lo hacen o más comúnmente odian con quien lo hacen (coworkers, jefes, managers, etc) Esto hace que ese tiempo que se supone estamos viviendo se vuelva menos apreciable.   

Pero, ¿qué pasaría si no tuvieras que someterte a la carga emocional de tener que ir a trabajar y simplemente vivir el resto de tu día sin cargar ese estrés?  

Tal vez esa pregunta no es para ti sino para tu otro yo de la oficina; ese yo del trabajo que está pensando en el perro durmiendo. Si ese “yo” es el que está leyendo esto, la respuesta tal vez la encuentres en este thriller psicológico de ciencia ficción especulativa SEVERANCE. Una mezcla entre Being John Malvokch, Eternal sunshine of the spotless mind y Office Space    

¿De qué trata? 

Severance, (Apple TV+) Es una serie basada en esta realidad donde por medio de un chip es posible separar dos personalidades: la del trabajo y la de tu vida diaria sin que una sepa lo que hace la otra. Este procedimiento es conocido como “severance”. Es una premisa embriagadora. Si te pagaran por hacerlo, ¿lo harías? 

Este proyecto es producido y dirigido de manera brillante por Ben Stiller y protagonizado por Adam Scott como Mark, Britt Lower como Helly, y Patricia Arquette como Harmony. Los acompañan también John Turturro y Christopher Walken.  

Los hechos ocurren en Lumon, una poderosa corporación con intenciones misteriosas y uno de los escenarios distópicos más inquietantes del mundo del streaming. Lumon es ese lugar de trabajo en donde todos quieren trabajar, pero nadie quiere estar. Es el primer lugar que ofrece el sistema “severance” que, fuera de este ambiente laboral ficticio, es un tema que polariza a la gente (como ya lo vemos en muchos contextos sociales de hoy en día) como la legalización de las armas, el aborto, etc.  

La Trama 

Parte del interés de esta serie es que maneja de manera brillante la psicología de varias de las personalidades que uno encuentra en una oficina de trabajo: El que obedece todas las reglas, el que ama en exceso su trabajo, la que quiere huir a toda costa, el que trabaja de más para satisfacer a sus jefes, y al que le vale lo que suceda. Vemos como todas esas personalidades se unen por un mismo fin, a veces sin planearlo tus compañeros de trabajo se convierten en tus amigos sin tener nada en común» 

Severance habla muy bien sobre la solidaridad de los trabajadores, y de cómo estos se pueden unir frente a la opresión.  hace que el trabajo sea aceptable: tus compañeros de trabajo se convierten en tus amigos y, con suficientes vínculos traumáticos 

El Conflicto 

El conflicto de la serie empieza cuando nos damos cuenta de que ninguna de las personalidades puede tener comunicación entre sí. Esto vuelve a la serie más ominosa y desesperante cuando vemos a los personajes siendo sometidos a torturas psicológicas y en general siendo usados como herramientas más que como personas. Esto hace que uno de los personajes no quiera continuar, pero su otro “yo” no lo sabe o no le importa. Lumon puede representar una versión particularmente infernal de lo que es trabajar en una oficina. No tiene que alejarse mucho de la realidad para representar la crueldad o la indiferencia de cualquier trabajo.     

Una de las fallas es que mezcla el humor negro con el humor intelectual que a veces no se sabe en qué estado ponerte. Pero decir falla es una exageración ya que el estado general de la serie no cambia. Otro detalle son los cabos sueltos. Entramos a la historia de la serie ya empezada y aunque poco a poco nos va llenando los espacios vacíos muchos de ellos quedan sin responder, pero eso al final no influye.  

Si bien la comedia de situación en el lugar de trabajo ha sido un elemento básico de la televisión durante décadas, ningún programa sobre el trabajo ha capturado con tanta precisión cuán dañino puede ser el trabajo en la vida real. No todos los jefes son como Leslie Knope y uno no es Jim Halpert; lo más probable es que uno sea como Stanley Hudson, dolorosamente consciente de la estupidez del trabajo y de tus coworkers. 

Conclusión

Al final Severance lo deja claro, como diria Tyler Durden: “No somos nuestro trabajo”, debe existir equilibrio entre el trabajo y la vida porque mucho de lo que hacemos no ocurre fuera de nosotros sino en el interior y para eso no hay lugar donde realizarlo y aunque no lo parezca pensar es una actividad.  Una de las frases llamativas donde nos damos cuenta que el trabajo se opone a la vida es cuando Mark le dice a Helly “si solo esperas tener cosas que te importen fuera de Lumon, es porque sabe que tu trabajo no es una de ellas”. 

Nuestro Veredicto

A pesar de todos los elementos extraños de Severance, la única ciencia ficción real es la tecnología que destruye la conciencia; todo lo demás está anclado en esta realidad: el sufrimiento, el estrés, el enojo, la frustración; todo eso es real y por eso esta serie es muy buena, por como la refleja. Tenía razón Roger waters cuando dijo “Hanging on in quiet desperation is the English way” (Aguantar en silenciosa desesperación es el estilo inglés) solo que ya no aplica nada más a los ingleses ahora es el común denominador en todo el mundo.